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lunes, 30 de enero de 2012

CREMA DE ZANAHORIAS CON CRUJIENTES DE SÉSAMO Y AMAPOLA


Es invierno y sienta bien un primer plato calentito, que nos sirve para entonar el cuerpo. En este caso hemos mezclado la verdura con la fruta creando un conjunto que armoniza y nos da un toque distinto. De todos modos el zumo de naranja es optativo, y podéis probarlo y después decidir si en el futuro se lo ponéis o si lo preferís más clásico.

INGREDIENTES: Para 4 o 6 personas

3/4 kilo de zanahorias
1 puerro
1 cebolla grande
1 patata terciada
Un chorro de aceite de oliva
el zumo de una naranja (optativo)
3/4 de caldo de pollo ó la misma cantidad de agua en la que disolveremos una pastilla de caldo
Sal y pimienta
Una cucharada de nata montada para cada cuenco
2 hojas de pasta filo
Una cucharada de semillas de sésamo
Una cucharada de semillas de amapola

MODO DE HACERLO:

Pelar las zanahorias y cortarlas en trozos. Pelar y cortar la cebolla, el puerro, y la patata. Poner aceite en una cacerola y pochar la cebolla y el puerro y cuando comience a ponerse transparente, incorporar las zanahorias y la patata, y rehogar todo el conjunto. Añadir el caldo, el zumo de naranja y la sal. Dejar cocer hasta que las zanahorias estén blanditas. Triturar. Rectificar el punto de sazón y poner un poquito de pimienta blanca recién molida.
Extender la pasta filo sobre una bandeja de horno a la que habremos puesto un papel vegetal. Con la ayuda de un pincel ponerle un poco de aceite y cortar unos rectángulos de 6x12 aproximadamente. Espolvorear unos con semillas de sésamo y otros con semillas de amapola. Introducir en el horno precalentado a 180º hasta que comiencen a dorarse (cuidado pues es muy rápido).
Poner la crema en un cuenco, y en el centro colocar una cucharada de nata y sobre el borde del cuenco un crujiente de sésamo y otro de amapola.

miércoles, 5 de octubre de 2011

CREMA DE VEGETALES


La diferencia que vamos a encontrar al preparar esta crema, es que previamente asamos los vegetales, lo que le va a dar un sabor distinto. Al hacerla de esta forma su proceso es un poco más laborioso que si la preparamos a la manera tradicional, pero resulta diferente.

INGREDIENTES:


• 2 berenjenas 4 tomates rojos y maduros
• 1 pimiento rojo
• 2 dientes de ajo
• 1 cebolla
• Aceite de oliva
• Sal y pimienta
• Un manojito de cilantro
• 200 cc. de nata liquida
• 1 litro de caldo vegetal
• Un puñadito de piñones

INGREDIENTES PARA PREPARAR 1 LITRO DE CALDO VEGETAL:

• Litro y medio de agua
• 2 zanahorias
• 2 ramitas de apio
• 1 puerro
• 1 cebolla pequeña
• 1 nabo
• 1 tomate pequeño
• 3 ramitas de perejil
• 2 hojitas de laurel
• Un poquito de sal
• 6 granos de pimienta
• 200 gr. de calabaza

MODO DE HACERLO:

Primero preparamos el caldo de verduras, y para ello las pelamos, las lavamos y las, cortamos en trozos pequeños. Ponemos el agua en una olla y cuando comience a hervir ponemos la sal, la pimienta, el laurel y las verduras, y las dejamos que cuezan unos 45 minutos a fuego lento para que el caldo adquiera mayor sabor. Una vez bien cocido todo ello, colamos y reservamos.
Cortar las berenjenas por la mitad, ponerles sal y colocar sobre un colador durante media hora aproximadamente para que suelten el amargor. Pasado este tiempo, secarlas y colocarlas sobre una bandeja de horno junto con los tomates partidos por la mitad, la cebolla también partida, los ajos enteros y el pimiento entero.

Regarlo con un chorrito de aceite, e introducir en el horno precalentado a 180º durante 30 minutos. Pasado este tiempo, retirar los tomates que es lo primero que se hace y colocarlos en un cuenco tapado y continuar asando el resto hasta que este todo listo que vendrá a ser otra media hora aproximadamente. Colocar en resto de los vegetales junto con los tomates, taparlo de dejar que sude un rato. Pelar los tomates, el pimiento, los ajos, retirar la primera capa de la cebolla que estará algo dura, y cortar todo ello en tiras guardando el caldito que hayan soltado al reposar. Poner un chorrito de aceite y cuando esté caliente rehogar los vegetales. Añadir el caldito que teníamos reservado y el caldo de vegetales y dejar que cueza todo junto durante unos 30 minutos aproximadamente. Triturar y colar pasándolo por un colador y apretando la pulpa con el rever de un cucharón. De este modo os quedará una crema bien fina. Sazonar con sal y pimienta Cuando lo vayáis a tomar calentarlo y añadir la nata al tiempo que lo movéis con una cuchara de madera.
Para preparar el aceite de cilantro, ponemos 200 cc de aceite en el vaso de la batidora, le añadimos el cilantro lavado y picado y trituramos. Reservar




Tostar los piñones en una sartén con cuidado de que no se os quemen.



Emplatar y añadir un chorrito de aceite de cilantro y un puñadito de piñones en el centro del plato.
Nota: Lo de la nata es optativo, pues también está rico sin ella y tiene menos calorías, pero desde luego la nata de aporta un punto muy rico.

viernes, 12 de febrero de 2010

CREMA DE PUERROS CON TRUFA NEGRA


Las cremas son ideales como entradas y si las servís en una copa bonita pueden ser muy resultonas para una comida o cena de invierno en la que celebréis algo especial.

INGREDIENTES:

• 8 Puerros
• 4 Patatas
• 2 Latitas de trufas negras
• Aceite de oliva
• Cebollino
• Sal y pimienta blanca
• 1 Brik pequeño de nata
• Aceite de oliva
• Aceite de trufa

MODO DE HACERLO:

Lo primero que vamos a hacer, es preparar la víspera el aceite de trufa, y lo haremos de la siguiente forma: Filetear finamente las trufas de una de las latas (suelen tener 2 trufas). Poner 200 ml. de aceite a calentar y cuando adquiera aproximadamente 170º añadir las láminas de trufa y mover el aceite con una cuchara de madera para que vaya distribuyéndose el aroma por todo el aceite. Dejar enfriar y macerar hasta el día siguiente. Pasar por la turmix, colar y dejar reposar en un frasco de cristal, de este modo cuando lo vayamos a utilizar, el sabor del aceite es muy intenso, pero no se aprecia a simple vista la existencia de trufa en el aceite.
Lavar y picar los puerros y las patatas:















Poner aceite en una cazuela de fondo grueso, y rehogar las patatas y los puerros. Antes de que tomen color, salpimentar, cubrir con agua y cocer:

Una vez que esté todo blandito, triturar y posteriormente pasar a través de un colador fino ayudándonos con el revés de un cacillo de servir:


















Volver a poner sobre el fuego, y sin dejar que hierva, añadir el caldito que vine en los tarros de las trufas, y la nata al la vez que movemos con una cuchara de madera.
Picar el cebollino, dejando unas ramitas largas. Laminar las otras trufas.
Servir en copas, poniendo encima, un par de láminas de trufa, un poco de cebollino picado, un chorrito de aceite de trufa, y dos ramitas largas de cebollino.

Nota: si en lugar de hacerlo con trufas de lata lo hacéis con trufas fresca, el resultado es espectacular, el inconveniente: el precio

viernes, 29 de enero de 2010

CREMA DE COLIFLOR CON TROPEZONES


La coliflor es una verdura emparentado con el brécol, es por eso que, excepto en el color, se parece tanto a él. Su principal componente es el agua, lo que acompañado del bajo contenido de hidratos, proteínas y grasas que presenta la convierten en un alimento de escaso aporte calórico, siendo por otro lado una buena fuente de fibras, vitaminas y minerales.


La receta que hoy os propongo tiene el encanto de los tropezones, que la hacen más apetitosa y más atractiva. Os la recomiendo.

INGREDIENTES:

1 Coliflor.
1 Puerro grande o dos pequeños.
1 patata.
250 gr. de setas variadas de las de pequeño tamaño.
3 lonchas finas de jamón serrano.
Aceite de oliva.
Sal y pimienta.
Nata liquida.
Agua o un fondo blanco.

MODO DE HACERLO:

Separar los ramilletes de la coliflor y lavarlos. Quitar la parte verde de los puerros, lavarlos bien y picarlos. Pelar, lavar y picar la patata. Poner el aceite en una cazuela, y rehogar en ella los puerros y la patata, sin dejar que se doren. Añadir la coliflor y cubrir con el agua o mejor con el fondo blanco (es mejor que no os paséis de caldo y vayáis añadiendo a medida que os lo pida) dejar cocer a fuego lento hasta que este blandito. Triturar, salpimentar y añadir poco a poco la nata a la vez que vamos moviendo la crema con una cuchara de madera.
Poner un poquito de aceite en una sartén y saltear el él las setas. Salpimentarlas. Saltear levemente el jamón que habremos cortado en juliana. Servir la crema bien caliente y en el centro una cucharada colmada de la guarnición de setas y jamón.

lunes, 11 de enero de 2010

CREMA DE CALABACÍN Y ZANAHORIAS CON HUEVO POCHÉ

















Las sopas y las cremas son un gran aliciente para los días de invierno, y si además vamos mezclando distintas verduras y hortalizas obtendremos platos variados y apetitosos.
Esta crema que os propongo hoy, tiene el aliciente del huevo poché, que le da un toque apetecible y distinto.

INGREDIENTES:

• 3 Calabacines medianos
• 2 zanahorias
• 1 patata
• 1 puerro
• 1 cebolla
• 1 trocito de opio
• Aceite de oliva y sal
• 1 huevo por persona

MODO DE HACERLO:

Pelar los calabacines, las zanahorias, la patata, el puerro, y la cebolla y trocearlos. Lavar el apio, retirarle las hebras y cortar que trozos que uniremos al resto de las hortalizas. Poner aceite en una cazuela y cuando este caliente, rehogar todas las verduras en él. Salpimentar, cubrir con agua y llevar a ebullición. (tener cuidado con el liquido que ponéis, pues el calabacín suelta mucha agua, por lo que es mejor ir añadiendo a medida que os lo pida la cocción, de este modo no tendréis que quitar nada de agua al triturarla y quedará mucho mas sabrosa). Una vez cocida, triturar y pasar por un colador de malla al tiempo que apretáis bien con la mano de un almirez para quede una crema bien fina. Rectificar el punto de sazón si fuese necesario.
Coger una taza, humedecerla por dentro y forrar su interior con papel de cocina transparente:


Con un pincel de cocina, untar con aceite el papel y después cascar un huevo en su interior. Salpimentarlo:

Coger los extremos del papel y cerrarlo con un hilo de cocina:



Poner una cazuela con agua en el fuego y cuando comience a hervir, poner sobre el agua el paquetito que tenemos preparado y dejarlo cocer durante 4 minutos. El huevo deberá tener cocida la clara y blandita la yema.

Prepara un cuenco con agua y hielo y pasado el tiempo de cocción, introduce los saquitos en el agua helada para cortar la cocción y que no continúen haciéndose con el calor residual que tienen. Coloca los saquitos en un plato y quítales el papel transparente con la ayuda de una tijera:



Poner la crema bien caliente en cada plato y en el centro de cada uno de ellos colocar un huevo. Regar la crema con un chorrito de aceite de oliva.
Podéis presentarlo en la mesa, con el huevo entero, o si preferís podéis dar un ligero corte al huevo para que se salga un poco la yema.

domingo, 3 de enero de 2010

CREMA DE CALABAZA CON QUENELLES DE JAMÓN, BOLETUS Y NUECES

Esta crema que os propongo es una sopa sencilla pero deliciosa en la que vamos a poder deleitarnos con el sabor de la calabaza. Ésta, con su pulpa jugosa y su atractivo color, va a deleitar nuestro paladar al tiempo que el contraste que le aportan las quenelles nos proporcionan un punto muy agradable tanto de originalidad como de textura y sabor.

INGREDIENTES:

1 Calabaza de 1 kg. aproximadamente
2 patatas
1 cebolla
1 puerro
Aceite de oliva, sal y pimienta
12 brik pequeño de nata

Para las quenelles:

2 boletus
Un puñadito de nueces peladas
2 lonchas finas de jamón serrano
1 brik pequeño de nata para montar

Para el aceite de nuez:

Aceite de oliva
12 nueces peladas

MODO DE HACERLO:

Comenzaremos preparando el aceite de nuez. Para ello machacaremos las nueces en un mortero sin deshacerlas demasiado y las mezclaremos con el aceite. Dejar reposar 24 horas para que el aceite tome sabor.
Cortar la calabaza, pelarla y quitarle las semillas y los filamentos. Pelar y trocear las patatas, la cebolla y el puerro. Poner aceite en una cazuela de fondo grueso y saltear durante unos minutos el puerro y la cebolla. Cuando van a comenzar a tomar color añadir las patatas y la calabaza y saltearlo nuevamente todo junto. Cubrir con agua y dejar cocer a fuego lento y sin tapar hasta que esté todo blandito. Esta cocción deberá hacerse muy despacio y el agua debe cubrir los ingredientes pero lo justo para que no quede muy aguada por lo que se recomienda ir añadiendo agua a medida que nos lo pida. Una vez cocida salpimentar y triturar dentro de la misma cazuela hasta que tengamos una mezcla homogénea. Para obtener una crema más fina, pasarla por un colador de malla. Incorporar la nata y mezclar bien con una cuchara de madera. Reservar caliente.
Cortar el jamón en tiras finitas y los boletus en dados. Poner un poco de aceite en una sartén y saltear los boletus. Cuando este prácticamente listos incorporar las tiras de jamón y saltearlas unos instantes. Sacar del fuego y mezclarlos con las nueces.
Montar la nata bien firme y añadirle la mezcla de nueces, boletus y jamón suavemente y con movimientos envolventes para que la nata no baje. Colocar la crema bien caliente en copas de cristal y en el último momento preparar las quenelles, para lo cual tomaremos una cucharadita de nata y la cubriremos con otra cucharadita formando entre las dos cucharas una quenelle de nata. Depositarla con cuidado encima de la crema. Esto es muy sencillo de preparar pero deberéis hacerlo con cuidado pues es lo que le da el toque de originalidad. Regarlo con un chorrito de aceite de nuez que potenciará su sabor.

martes, 3 de febrero de 2009

CREMA DE COLIFLOR CON VERDURITAS SALTEADAS


La coliflor es una inflorescencia de forma redonda y carnosa de gran tamaño y perteneciente a la familia de las crucíferas.
Se trata de una planta anual, pero su mejor momento está entre los meses de Septiembre a Enero.
Sabemos que una coliflor es buena, cuando está bien blanca y su corazón es compacto.
Existen distintas variedades y atendiendo a su color hay tres clases: la blanca que es la más común y que debe su color a que los agricultores unen las hojas que la rodean para evitar que la de el sol. La coliflor verde, en la que se permite su exposición al sol y la coliflor morada caracterizada por la presencia de antocianinas, que son pigmentos de acción antioxidante responsables de su color violáceo.
Puede prepararse de infinidad de maneras: al vapor, asada, frita, gratinada y un largo etc. y también podemos utilizarla como guarnición para otros platos de carne o pescado. Es un ingrediente básico de nuestras exquisitas menestras, e incluso puede formar parte de una tortilla o unos espaguetis.




INGREDIENTES:

Una coliflor que pese aproximadamente 1 kilo
1 puerro (solo la parte blanca)
2 patatas
12 espárragos trigueros
12 ajetes
½ litro de fondo blanco (caldo de carne)
Un paquete pequeño de nata
Una naranja
Una loncha de tocino de jamón ibérico
Aceite de oliva y sal

MODO DE HACERLO:

Quitar las hojas exteriores de la coliflor y separar todas sus pencas. Lavar el puerro y cortarlo en trozos de dos o tres centímetros. Pelar las patatas y cortarlas en trozos.


Poner aceite en una cazuela, y rehogar en el las verduras. Cuando estén listas, incorporar el caldo y dejar cocer hasta que estén blandas. Triturar y pasar a través de un colador para que nos quede la crema bien fina:


Exprimir el zumo de la naranja y añadírselo a la crema mezclándolo bien. Incorporar la nata y mezclar nuevamente. Rectificar el punto de sal si lo necesita y reservar. (No le ponemos sal hasta este momento, porque el caldo de carne ya lo lleva)
Poner en una sartén el tocino ibérico para que desprenda su grasa. Lavar y trocear los espárragos y los ajetes, a los que habremos quitados las partes duras. Saltearlos en el aceite del ibérico, dejándolas al dente y reservar.
Llevarlo a la mesa emplatado. Pondremos la crema y sobre ella un puñadito de verduras.


Nota: Si no se quiere hacer un fondo blanco, podeis utilizar simplemente agua con sal o con una pastilla de caldo, pero no es lo mismo.

sábado, 15 de noviembre de 2008

CREMA DE CALABACÍN



El calabacín en una variedad botánica de la calabaza y pertenece a la familia de las cucurbitáceas.
Aunque es una hortaliza de verano, se puede adquirir durante todo el año, si bien los ejemplares más sabrosos, son los de los meses que van de julio a septiembre.
Al comprarlos debemos elegir aquellos que estén firmes al tacto, compactos, pequeños o medianos, ya que los grandes suelen tener demasiadas pepitas y su carne no es tan tierna, sin manchas en la piel y pesados con relación a su tamaño.




INGREDIENTES:

• 1 kl de calabacines
• 1 calabacín pequeño para guarnición
• 2 puerros (solo la parte blanca)
• 2 zanahorias
• 150 ml de aceite de oliva para la crema y otro poco para freír los calabacines de la guarnición
• Una patata pequeña
• ½ litro de agua (aproximadamente)
• 6 quesitos en porciones
• Sal, pimienta y nuez moscada

MODO DE HACERLO:

Pelar los calabacines, la patata y las zanahorias y cortarlas en trozos. Lavar el puerro, quitarle lo verde, trocearlo y ponerlo junto a las otras verduras.
Poner una cazuela en el fuego con el aceite, y una vez éste caliente, rehogar en él las verduras. Incorporar el agua (tener cuidado pues es calabacín contiene mucho agua, por lo que es mejor que tengáis que añadir que no que os paséis). Dejar cocer hasta que este todo tierno. (Si tenéis que añadir agua, que sea caliente). Salpimentar y ponerle un poquito de nuez moscada. Añadir los quesitos y triturar bien con la batidora.
Lavar el otro calabacín, secarlo, quitarle las puntas y cortarlo en rodajas finas (sin pelar) salarlo. Poner aceite en una sartén, y cuando esté bien caliente freír en tandas las rodajitas que hemos pelado. Ponerlas sobre papel absorbente, y una vez que hemos emplatado la crema poner un puñadito de rodajitas fritas por encima. Servir bien caliente.

lunes, 21 de enero de 2008

CREMA DE RÚCULA


La rúcula es originaria de la cuenca del Mediterráneo y Asia occidental, y ya en épocas romanas se recolectaba como hierba silvestre para uso común. En la década de los 90, comenzó a gozar de una gran popularidad, al tiempo que se inició su cultivo a gran escala. Es protagonista en especial de la gastronomía de países como Italia, Francia y Grecia.
Lo cierto es que se trata de una planta silvestre muy común, conocida en nuestro país con el nombre de “oruga”, abundando en los bordes de los caminos y en solares próximos a las ciudades. En una palabra, ha pasado de ser una mala hierba, a una planta que hoy día goza de fama internacional en la alta cocina.
La rúcula se utiliza principalmente en ensaladas, pero también es un ingrediente idóneo de platos calientes de pasta y arroz. En Italia, la usan mucho en pizzas, añadiéndose después del horneado. También preparan un “pesto de rúcula” (una variante de la popular salsa al pesto), y como ingrediente para los carpaccios.
Tiene un característico sabor amargo y picante al mismo tiempo, y es excelente para mejorar la digestión, puesto que estimula las secreciones digestivas. Es rica en vitamina C y hierro.



INGREDIENTES:

• 1kilo de patatas
• 1 litro de caldo de verduras
• 2 manojos de rúcula
• 100 ml. de nata
• 100 gr. de almendras laminadas
• Aceite de oliva
• Sal

MODO DE HACERLO:

Pelar y trocear la patata y ponerla a cocer en el caldo de verduras hasta que esté blandita. Añadir la rúcula y dejar que cueza otros diez minutos más. Triturar bien para que la  crema resulte sea bien fina. Añadir la nata y rectificar el punto de sal. Tostar las almendras. Servir en cuencos individuales, poniendo por encima un puñadito de almendras y un chorrito de aceite de oliva.


INGREDIENTES PARA EL CALDO DE VERDURAS:

• 1 litro de agua
• 3 ramitas de apio
• Un puerro
• Un nabo
• 2 zanahorias
• Un trocito de calabaza
• ½ cebolla
• Sal

MODO DE HACER EL CALDO DE VERDURAS:

Poner en una cazuela el agua con sal, y cuando comience a hervir añadir todas las verduras, una vez lavadas y troceadas. Cuando estén bien cocidas, colar.

Nota: También podéis tomarla fría.



lunes, 14 de enero de 2008

SOPA DE PESCADO


Hace siglos que las sopas forman parte de los menús diarios de mucha gente principalmente durante los meses de invierno. Pero una sopa sencilla, puede convertirse en un plato de fiesta si le incorporamos mariscos y pescados de roca que se mezclarán deliciosamente para sorprendernos con un sabrosísimo caldo.
Esta receta que voy a daros la comí por primera vez en casa de mi cuñada, yo la hacia muy parecida, pero ella le había incorporado el pan y el puerro, y creerme, es un acierto.



INGREDIENTES:

• 1 kilo y medio de pescado de roca (congrio, rape, urta cabracho, rascacio, etc.)
• ¼ Kl. de gambas
• ½ Kl. mejillones
• ½ Kl. de chirlas
• 1 puerro (solo la parte blanca)
• 1 diente de ajo
• ¾ de cebollas
• 2 tomates bien maduros (pueden servir tomates enteros de lata)
• 4 rebanadas de pan del día anterior
• Aceite
• Perejil y azafrán

MODO DE HACERLO:

Lavar bien el pescado, cortarlo en trozos y ponerlo en una cazuela con agua y sal. Cubrirlo con tres litros de agua. Dejarlo cocer a fuego moderado hasta que el pescado esté listo pero con cuidado para que no se seque. Colarlo y separar la carne del pescado de las espinas reservando ambas cosas por separado. Lavar los mejillones raspándoles bien la cáscara y cocer en un poquito de agua. Colar el agua junto con la de cocer el pescado, desechar la concha y cortar los mejillones en dos o tres trozos, según sean de tamaño. Juntar con el pescado que tenemos reservado. Lavar bien las chirlas y dejarlas un rato en agua con sal. Enjuagarlas de nuevo y abrirlas en un poco del caldo que tenemos. Sacarlas de la concha y juntarlas con el pescado. Pelar las gambas y cocer las cáscaras en el caldo de cocer las chirlas. Colar y juntar el caldo con el anterior y las cáscaras junto con las espinas que tenemos reservadas. Añadir un poco de caldo a la mezcla de espinas y cáscaras de gambas, y triturar bien. Pasar la mezcla por un colador, apretando bien para sacar todos los jugos y juntar con el caldo. Reservar por un lado los pescados y mariscos cocidos, las gambas crudas y el caldo.
En una cazuela, poner el aceite, y pochar en él las cebollas, el ajo y el puerro, todo ello cortado muy menudito (como es mucha cantidad, necesitaréis bastante aceite, cuando ya lo tengáis bien pochado, escurrirlo y dejar solo el necesario). En el aceite que vayáis a usar, freír el pan y añadirlo al sofrito anterior, incorporar los tomates rompiéndolos con una espumadera y dejarlos hasta que se hagan. Una vez listos, triturar todo el sofrito y añadírselo al caldo de la sopa que tenemos reservado. Llevarlo a ebullición y dejarlo cocer durante 15 minutos aproximadamente. Retirar del fuego y añadir el pescado y el marisco que tenemos reservado, así como las gambas crudas. Tapar la cazuela (las gambas se hacen con el calor del conjunto). Tostar el azafrán, desleírlo en un poco de caldo y añadirselo, así como dos cucharadas de perejil bien picado. Rectificar el punto de sal y servir bien caliente.

miércoles, 9 de enero de 2008

CALDO CASERO


El caldo hecho en casa, es uno de los pilares de la buena cocina. El principio de un buen caldo es el líquido que se logra cociendo lentamente carne, huesos, verduras y condimentos en agua. Cuando se han extraído todos los sabores y valores alimenticios de los ingredientes, se cuela el líquido y el caldo resultante, es la base de todas las sopas, desde las más habituales, a las más exóticas.
Algunas historias sobre el caldo. Nerón, gran aficionado al canto, tomaba todos los días un caldo caliente cuya base eran los puerros, y a él le atribuía la cualidad de protegerle las cuerdas vocales. Apicio, el mas famoso restaurador de la antigua Roma, servía refinadas y suculentas sopas que hacía con lentejas, garbanzos y guisantes, muy especiadas y condimentadas con aceite y garúm que era un saborizante a base de pescado fermentado y salado y que era el equivalente a las pastillas de caldo concentrado de hoy.
Lo cierto es que la sopa, independientemente de refinamientos que muy pocos han podido saborear en el transcurso de la historia, fue el alimento que salvo del hambre a muchas personas. Unas veces hechas de pan y agua, otras veces con cereales y las menos con carne. En la edad media, la sopa tuvo un triunfo rotundo y las sazonaban principalmente con canela, jengibre, azafrán y ajos.
Lo cierto es que estamos en invierno, ¡qué época más buena para la cuchara! No hay nada que reconforte tanto, como un buen plato calentito de sopa. Así que manos a la obra. No os importe hacer una buena cantidad, pues podéis congelarla en tarros de cristal, y cuando os apetezca, solamente hay que sacar uno, descongelar y degustar.


INGREDIENTES:

• 300 gr. de carne de vaca (falda, morcillo, etc.)
• Un hueso de la babilla
• Un hueso de rodilla y otro de caña
• Un hueso de espinazo
• Un hueso de jamón
• Un cuarto de gallina
• 2 caparazones de pollo
• Un puerro
• 3 ramas de apio
• Un nabo
• Una rodaja de calabaza
• Una cebolla
• 2 zanahorias
. Sal


MODO DE HACERLO:

Poner la víspera en un cuenco con agua fría, todos los huesos para que suelten la sangre. Lavarlos, escurrir y rascarlos bien con el cuchillo (sobre todo el de jamón).
Poner una olla grande con agua y sal y cuando comience a hervir, añadir las carnes, los huesos y las verduras, lavadas y cortadas. Salar y cuando comience a hervir espumarla cuantas veces sean necesarias. Dejar que cueza lentamente durante 3 o 4 horas, hasta que las carnes estén blanditas. (Si no tenéis tiempo podéis hacerlo con la olla rápida, aplicando los tiempos que os marquen. Una vez terminada la cocción, colar e introducir en el frigorífico hasta el día siguiente. Pasado este tiempo, sacar y con ayuda de una espumadera, quitar la capa de grasa que se habrá formado en la parte de arriba, y ya estará lista para consumir o para congelar.

Nota: Con la carne podéis hacer croquetas, ropa vieja, etc.

martes, 2 de octubre de 2007

CREMA DE CALABAZA



Existe una gran variedad de de calabazas, muchas de las cuales no se cultivan en Europa. El fruto es de tipo baya y la pulpa de color amarillo-anaranjado, densa, de textura firma y sabor dulce. A veces es muy grande y en los mercados puede encontrase en trozos. Es originaria de Sudamérica y fue traída a Europa a finales del siglo XVI. Sirve tanto para preparar platos dulces como salados y también es muy utilizada en decoración por sus formas y colores.
Nosotros hoy vamos a preparar una crema de calabaza, que es una receta sumamente sencilla, pero muy rica.


INGREDIENTES:

• 1 Kg. de calabaza
• 2 cebollas medianas
• 1 puerro
• 1 diente de ajo
• ½ pimiento verde
• 2 patatas medianitas
• 1 vasito de tomate frito (mejor casero)
• ½ vaso de aceite de oliva
• Agua y sal

MODO DE HACERLO:

Pelar la calabaza, quitarle las semillas y trocearla. Pelar las cebollas y picar junto con el pimiento, el puerro y el ajo. Poner una cacerola al fuego con el aceite y rehogar la cebolla, el ajo el puerro y el pimiento. Añadir las patatas troceadas y la calabaza. Remover bien para mezclar. Incorporar la salsa de tomate y añadir dos vasos de agua. Salar.
Dejar cocer a fuego muy lento durante una hora aproximadamente. Si durante la cocción veis que lo precisa añadirle un poco más de agua, pero tener cuidado pues la calabaza contiene gran cantidad de líquido. Una vez cocido, triturar y posteriormente pasar a través de un colador, como siempre lo hacemos, ayudándonos con la parte redondeada de un cazo, de este modo eliminaremos los restos de fibra que hayan podido quedar y la crema estará mucho más fina.
En el momento de servir podéis regarla con un chorrito de aceite de oliva virgen o con un chorrito de nata

lunes, 11 de junio de 2007

SOPA DE CEBOLLA



La sopa de cebolla, es de origen francés, y es un modo muy agradable de comenzar una comida. Puede hacerse en una cazuela grande que pueda meterse en el horno, pero resulta mejor si se prepara en cazuelas individuales.

INGREDIENTES:

Para el caldo:

· ¼ de carne de ternera (morcillo, falda, etc.)
· 1 o 2 huesos de ternera (si puede ser uno de babilla)
· 1 hueso de jamón
· 1 hueso de espinazo salado
· ¼ de gallina
· 2 ramas de apio
· 1 puerro
· 1 nabo
· 2 zanahorias
· 1 trocito de calabaza
· un puñadito de garbanzos (optativo)

Para el resto:

· Una cebolla grandecita por persona
· Aceite de oliva
· Una pizca de harina
· 2 o 3 rebanadas de pan (según el tamaño) por persona
· Queso emental o gruyere

MODO DE HACERLO:

Si se van a usar garbanzos, poner a remojo la víspera. Poner igualmente en agua la noche anterior,los huesos para que suelten la sangre. Por la mañana, poner agua en una cazuela, y cuando empiece a hervir meter los huesos bien lavados y la carne, dejar hervir espumando, y cuando no suelte mas espuma, añadir los garbanzos si puede ser metidos en una red (así no se deshacen), y las verduras troceadas. Salar y dejar cocer. Cuando esté listo el caldo, colar (los garbanzos, las verduras y la carne, podéis aprovecharlos para hacer croquetas, ropa vieja, etc.) y meter en el frigorífico para enfriar. Una vez frío, desgrasar, y reservar.
Poner en la olla a presión, el aceite, y cuando esté caliente, picar las cebollas, pochar sin que se doren, y cuando estén añadir la harina, y removiendo para que se cocinen. Medir cuanto caldo necesitáis (se prepara en cazuelas de barro individuales, así que probar con agua cuantos cazos os cogen en cada una, ya lo tenéis eso sí, daros cuenta que la cebolla también cuenta, así que si os cogen 2 cazos, calcular uno y medio) y añadirlo a la olla. Tapar y dejar el tiempo que necesite la olla que estéis usando, o cuando la cebolla esté blanda si es una cazuela normal. Una vez cocido, meter la batidora y triturarlo bien. Rellenar las cazuelas de barro. Freír las rebanadas de pan, y poner sobre papel absorbente para que chupe la grasa o bien, tostarlas, con lo la sopa queda más ligera, y poner un puñadito del queso, previamente rallado, por encina. Gratinar en el horno, y servir inmediatamente.

jueves, 1 de febrero de 2007

CALDO GALLEGO




Hace frío, ¿por qué no un buen caldo calentito para entonarnos? Aquí va:

INGREDIENTES:

* 1 vaso de los de agua de judías blancas
* 400 gr. de lacón
* 1 hueso de ternera de rodilla
* 1 hueso de espinazo y 2 huesos de jamón
* una cucharada de unto
* 450 gr. de grelos
* 1 patata grandecita, agua y sal

MODO DE HACERLO:

Poner a remojo las judías. Poner en agua los huesos y el lacón para que suelte la sal. Poner en una cazuela unos 4 l. de agua y echar las judías. Encender el fuego y cuando hierva añadir el lacón, los huesos y el unto. Espumar. Dejar cocer a fuego lento una hora aproximadamente y entonces añadir las patatas troceadas y los grelos limpios y cortados. Cocer hasta que las judías estén tiernas y probarlo antes de ponerle la sal. Retirar los huesos y picar el jamón y el lacón.

¡¡Rico, rico!!