viernes, 7 de octubre de 2011

GUISANTES CON JAMÓN

Cuando decimos guisantes, estamos hablando de una leguminosa rica en proteínas, fibra y minerales. Podemos encontrarlos de 3 formas, frescos, congelados o en conserva. Ni que decir tiene que como los frescos ninguno, eso si, solamente los encontrareis en temporada, y hay que calcular que de 700 gramos de vainas de guisante, obtenemos 575 gramos de guisantes en grano. Si os animáis con los frescos, no os vais a arrepentir, os lo aseguro, pero también son buena opción los otros.
Hay una variedad de “guisante” que se llama tirabeque y se come entero, con su vaina, quitándole únicamente las puntas y las hebras. Este tipo como es lógico nos aporta una mayor cantidad de fibra.
En algunos países se les llama arvejo o chícharo y en las regiones de Almería y Murcia pésoles, que realmente es su verdadero nombre ya que deriva del latín pisulum que es como los denominaban los romanos. A la primera persona que le escuche la palabra pésol, fue a Juani, la mujer de mi hijo Nacho. Yo no sabia que ese era su autentico nombre. En la zona de Almería los comen crudos, y realmente no me extraña, pues si están bien tiernos son un manjar.

INGREDIENTES:


• 700 gr. de guisantes (frescos, con su vaina)
• 2 o 3 cebolletas
• 1 diente de ajo
• 2 huevos
• 1 loncha de jamón veteado
• Aceite de oliva virgen

MODO DE HACERLO:

Quitar los guisantes de su vaina. Poner una cazuela con agua y sal en el fuego, y cuando comience a hervir, añadir los guisantes y dejar que cuezan a fuego medio durante 10 o 15 minutos. Una vez tiernos colar y reservar.
Cortar las cebolletas y el diente de ajo en bruniose, poner aceite de oliva en una sartén, y cuando el aceite comience a estar caliente añadir los ajos. En el momento que éstos empiecen a dorarse añadir la cebolla y dejar pochar.






Cuando este poniéndose transparente, añadir el jamón cortado en tiritas. Saltear unos minutos e incorporar los guisantes. Mezclar y dejarlo a fuego lento unos minutos para que se hagan amigos.
Lavar los huevos y ponerlos en un cazo con agua fría. Cuando comience a hervir, bajar un poco la temperatura y dejarlos que se hagan durante 10 minutos. Retirar, refrescar con agua fría, pelar y cortar en cuatro trozos cada uno.
Colocar los guisantes en una fuente y adornar con los huevos.

3 comentarios:

bocadoscaseros dijo...

Me encantan los guisantes ...um a ver si uno de estos días paso con Charo y nos zampamos unos cuantos, besos

juani dijo...

En Almería a los guisantes crudos les llamamos "présoles", supongo que ha sido una evolución local.
Cogerlos directamente de la mata y comértelos a pie de planta es uno de los mis mejores manjares.

Tiene muy buena pinta el plato.

Un beso

Carolina C'Est Moi dijo...

Tremendos estos guisantes, en casa nos encantan!

Bss